miércoles, 2 de diciembre de 2009

EXPEDICIÓN A LA SIERRA DEL PICACHO (I)


CERRO DEL CABEZO, 608m. Genuina estampa de un cono solitario y representativo de las montañas de la zona de JUMILLA: árida estepa entre los límites de La Mancha y el altiplano de Murcia en su ya decidido descenso hacia el mar.

El Cabezo forma un núcleo independizado en el extremo SW de la Sierra del Picacho. 200 metros sobre la carretera Nacional, levanta su vértice geodésico sobre un estrecha y alargada plataforma de roca que le confiere cierto atractivo de montaña airosa y no precisamente fácil. Aunque tampoco la relativa dificultad que impone una subida por pendientes inclinadas e inestables (incluido algún paso de escalada de básico nivel) llega a suponer un impedimento para el excursionista sin pretensiones de escalador. La vista sobre el desierto circundante (en especial hacia el cercano Cabezo del Asno y los picos de Cieza-Calasparra) y la contigua aguja pétrea de EL PICACHO es soberbia. Geológicamente representa un diapiro de materiales blandos (principalmente, yesos y arcillas; de ahí las canteras de caolín diseminadas por su contorno) que emergió en la orogénesis alpina a causa de la resistencia del zócalo mesetario frente al empuje de la placa africana. Estas remotas fuerzas y estructuras interiores han producido un paisaje de montañas-isla como la presente que salpican de bonitas formas y reductos boscosos la árida franja esteparia que entre el núcleo de las subbéticas en el SW (contorno oriental de Cazorla-Segura, y que a través de La Sagra, 2382m, llega al Revolcadores y sus satélites) y el paraíso subhúmedo de las Sierras de Alcoy, conforma el amplio y abierto arco del Prebético Externo.